Joom!Fish config error: Default language is inactive!
Please check configuration, try to use first active language
Me gusta cuando callas. Please,be quiet. |
![]() |
![]() |
![]() |
There are no translations available.
Magazine La Vanguardia Por favor, déjeme acabar el pensamiento… Esta frase era muy habitual en un político catalán del que se decía que tenía poco carisma. Era un comunicador educado y considerado, muy ajeno a la moda actual. Nunca ganó las elecciones seguramente porque nunca llegó a comunicar sus ideas al ritmo de nuestros tiempos. El ritmo conversacional de nuestra época es impaciente y acucioso; el espacio sonoro se ha convertido en objeto de lucha y captura a causa de su escasez. Sin ir más lejos, nosotros mismos podríamos reconocernos en las comidas familiares peleándonos por hablar alrededor de la mesa. Siempre hay alguien que suele estar callado, mientras los gritones le increpamos: “No te hemos oído hablar, ¿estás bien?” A este rezagado, casi siempre le cae la fama de tímido, tonto o lento. Para sobrellevar el regateo de atención de los demás y seguir manteniendo, a pesar de todo, el contacto, hemos decidido embestir sin rodeos por la vía del solapamiento del sonido con palabras atropelladas a voz en grito e interrupciones inclementes. No hay más que ver los programas televisivos que tanto agradan a la audiencia o las conversaciones en los restaurantes. ¿No hay silencio? No pasa nada, yo chillo más que el ruido ambiental. Al final siempre vence la voz más potente. No nos extrañe que nuestro estilo de conversación sea coherente con la evidencia de ser el segundo país más ruidoso del mundo después de Japón. Hablar como suecos o como españoles.
Interrupciones correctas e incorrectas. La autora afirma que existen conversadores que practican la “interrupción colaboradora” aunque las palabras se solapen, como apoyo entusiasta e participación para ratificar y animar a la persona que tiene la palabra. A los conversadores de “alta implicación” no les molesta ser interrumpidos porque, o bien tendrán en cuenta la interrupción, o bien la ignorarán si les conviene. Algunos grupos culturales raramente hacen pausas entre los turnos de palabra, ya que para ellos el silencio significa falta de conexión en una conversación amistosa. Evidentemente, Tannen se refiere a breves interrupciones, no a interrupciones para introducir un tema completamente distinto. Los conversadores de”alta consideración” nunca invaden una conversación, por lo que participar en una reunión de “altamente implicados” puede resultar una experiencia inmensamente frustrante para ellos. Hablando de nuestra realidad cultural, los españoles nos comunicamos de modo muy distinto a los latinoamericanos. Volumen, tono, rotundidad de los argumentos, capacidad de decir NO… Una periodista chilena comentaba después de su primer viaje a España: “Parecían enfadados conmigo todo el rato…, no entiendo porqué.”
|
Atención Plena: Elimina el malestar emocional
provocado por la multitarea y la dispersión mental
Ver más
Sitios amigos
Revista WEB
Mi amigo era un psiquiatra “ high achiever”, aquél que siempre se ponía el listón más alto para poder disfrutar superándolo. Obsesivo y perfeccionista, condiciones que hasta la fecha le habían hecho actuar bastante correctamente y controlar todas las situaciones de modo exhaustivo. Por supuesto tenía un super CV , las mejores notas, y todos los triunfos académicos y profesionales esperables para alguien de su edad.
No publicado
Nuestra vida está plagada de situaciones en las que se nos pasaron por alto detalles tan obvios que nos tuvimos que cuestionar para nuestros adentros si somos un poco lerdos o simplemente son los primeros síntomas de una enfermedad deteriorante. En otras ocasiones nos ocurre aquello tan típico de solo fijarnos en cosas que casualmente nos ocupan la mente o nos preocupan.